La Iniciativa de Ayuda para el Comercio ha permitido que numerosas organizaciones y organismos participen de forma activa en la prestación de ayuda a los países en desarrollo, y en particular a los países menos adelantados, con el fin de construir la infraestructura y la capacidad de oferta que necesitan para conectarse con los mercados regionales y mundiales y mejorar sus resultados comerciales. El nuevo paradigma de desarrollo en el marco de la Agenda para el Desarrollo después de 2015 exige un enfoque integrado para que el resultado de la ayuda para el comercio sea un desarrollo inclusivo y sostenible. Incorporar los costos del comercio como elemento central de la Iniciativa de Ayuda para el Comercio equivale a activar esa función de coordinación entre una gran diversidad de colectivos interesados.
La publicación conjunta de la OCDE y la OMC, La Ayuda para el Comercio en síntesis 2015, centra la atención en cómo la reducción de los costos del comercio ayudará a conseguir un crecimiento económico inclusivo y sostenible. En esta publicación se reúnen aportaciones procedentes del Marco Integrado mejorado, el Centro de Comercio Internacional, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo y el Banco Mundial.