Las Líneas Directrices de la OCDE para Empresas Multinacionales reconocen y alientan los aportes positivos de las empresas al progreso económico, ambiental y social, pero también reconocen que las actividades empresariales pueden generar impactos negativos relacionados con los trabajadores, los derechos humanos, el medio ambiente, el cohecho, los consumidores y el gobierno corporativo. Esta Guía ayuda a las empresas a comprender e implementar la debida diligencia para una conducta empresarial responsable (CER), según lo previsto en las Líneas Directrices de la OCDE para Empresas Multinacionales. También busca promover un consenso entre los gobiernos y las partes interesadas sobre la debida diligencia para una conducta empresarial responsable.