Atender el brote de coronavirus es la prioridad general a corto plazo. Las medidas de confinamiento oportunas y las acciones económicas bien dirigidas están ayudando a contener la pandemia y apoyar a los más afectados. Mirando hacia el futuro, impulsar la capacidad para realizar pruebas y actividades de rastreo y continuar preparándose para los aumentos en la demanda de atención médica son prioridades importantes.
El progreso social y económico de Costa Rica, centrado en el comercio, el bienestar y el uso sostenible de los recursos naturales ha sido notable. Un compromiso firme con la apertura comercial ha sido clave para atraer inversión extranjera directa y ascender en la cadena de valor. Los indicadores de bienestar son comparables con los estándares de la OCDE, e incluso más altos en algunas dimensiones. Sin embargo, Costa Rica enfrenta desafíos sustanciales para retener los éxitos alcanzados y continuar dirigiéndose hacia niveles de vida más altos. La situación fiscal continúa siendo una vulnerabilidad crítica. Grandes déficits amenazan la sostenibilidad de logros económicos, sociales y ambientales significativos. La brecha con las economías avanzadas continúa siendo grande debido a la baja productividad, y sigue existiendo una gran desigualdad. La reducción de las emisiones del sector del transporte es el principal desafío para cumplir el objetivo de ser una economía descarbonizada antes de 2050.
La implementación plena del reciente esfuerzo de reforma para lograr que las políticas clave se asemejen más a los mejores estándares es esencial. A pesar de un entorno político complejo, se ha alcanzado un consenso importante entre los partidos sobre la agenda de reformas relacionada con el proceso de adhesión a la OCDE. En los últimos 18 meses el impulso a la reforma ha sido impresionante, ya que se ha completado una cantidad significativa de iniciativas relacionadas con la adhesión a la OCDE. La implementación oportuna es crítica para revitalizar la recuperación, impulsar el crecimiento inclusivo y la sostenibilidad fiscal.
Las perspectivas de crecimiento se ven afectadas gravemente por la pandemia mundial de coronavirus. Siendo una pequeña economía abierta, Costa Rica está muy expuesta a la recesión económica mundial. Los principales canales de transmisión son el comercio y el turismo. La demanda interna también se ha debilitado, ya que las medidas de contención necesarias implementadas en Costa Rica impactan el consumo y la inversión. Los factores atenuantes y positivos son la caída significativa de los precios del petróleo y la diversificación de la economía. La tasa de desempleo aumentará significativamente.