La "economía social" ha desempeñado un importante rol a la hora de abordar y mitigar los impactos a corto y largo plazo de la crisis de COVID-19 sobre la economía y la sociedad. A corto plazo, los agentes de la economía social han contribuido a la recuperación de la crisis aportando soluciones innovadoras destinadas a reforzar los servicios públicos como complemento de la acción gubernamental. A largo plazo, las organizaciones de economía social pueden contribuir a reconfigurar la economía posterior a la crisis promoviendo modelos económicos inclusivos y sostenibles. Apoyándose en décadas de experiencia, sus características específicas y sus principios subyacentes, la economía social puede inspirar modelos de innovación social y un sentido de propósito a las empresas que operan en la economía de mercado.
La economía social y la crisis de COVID-19: Roles actuales y futuros
Medidas políticas clave de la OCDE ante el coronavirus (COVID-19)