Este capítulo define los tres indicadores clave en la cuenta de los hogares: el gasto de consumo final de los hogares, el ingreso disponible de los hogares y el ahorro. Luego examina la forma en que se identifican y presentan estos indicadores en las cuentas del sector hogares. Finalmente, el capítulo revisa la alternativa a la forma de medir el ingreso disponible y el consumo que propone el SCN 2008.
Comprendiendo las Cuentas Nacionales
Capítulo 6. Las cuentas de los hogares
Abstract
Un hogar es un grupo de personas que asumen colectivamente la responsabilidad de alimentarse y alojarse. Un hogar puede estar constituido por una o más personas que viven bajo el mismo techo y que generalmente están unidas por lazos familiares. Hay también “hogares institucionales”, que se componen, por ejemplo, de miembros de las fuerzas armadas que viven en cuarteles, o a bordo de barcos, los detenidos que viven en prisiones y las monjas que viven en conventos. Las cuentas nacionales no hacen distinción entre estas diferentes categorías de “hogares”, y las reagrupan en lo que se denomina el “sector hogares”, al que se asigna el código S14. Sin embargo, en la práctica el sector hogares comprende mayoritariamente a las familias.
Los otros sectores descritos en las cuentas nacionales – sociedades, gobierno general e instituciones sin fines de lucro – tienen un objetivo único: la producción de bienes y servicios. Por su parte, para los hogares las cosas son un poco más complicadas. Si los miembros de un hogar están empleados, perciben un ingreso que utilizan para adquirir bienes y servicios corrientes o para invertir en activos financieros. Sin embargo, los miembros de un hogar pueden también dirigir un negocio familiar, tal como una tienda, un café, una empresa de taxis o una explotación agraria. En las cuentas nacionales a este tipo de empresas se las denomina empresas individuales, que legalmente son empresas no constituidas en sociedad, que es la denominación alternativa con la que se designan también en este y otros capítulos del libro. Estas empresas no tienen accionistas y, en caso de quiebra, no tienen limitada su responsabilidad (véase el Capítulo 7, dedicado a las cuentas de las empresas). Los hogares también producen servicios de alojamiento (reales o imputados).
Como consecuencia, las cuentas del sector hogares tratan dos funciones muy diferentes: la producción de bienes y servicios, y la asignación del ingreso al consumo o al ahorro. En parte, por razones estadísticas no se hace distinción entre ambas funciones. En general, es posible separar qué parte de las operaciones relativas a la producción, el consumo intermedio, la remuneración y los impuestos corresponde a hogares “puros” y qué parte corresponde a empresarios individuales. De hecho, así lo hacen algunos países (como Francia y Estados Unidos) en los que se publica una cuenta incompleta de los empresarios individuales. A pesar de ello, en la práctica es imposible separar las operaciones distintas de las mencionadas, de ahí que las cuentas sean incompletas tanto para las empresas individuales como para los hogares “puros”.
Otros países de la OCDE publican cuentas agregadas de los hogares y de las instituciones sin fines de lucro al servicio de los hogares (ISFLSH). Esta agregación se basa en que las cuentas de las ISFLSH pueden asimilarse a las de los hogares, puesto que estas instituciones están financiadas, en una alta proporción, por los hogares y porque su objetivo principal es servir a los hogares. Además, las ISFLSH constituyen un sector pequeño y su inclusión en la cuenta de los hogares no tiene mucha influencia en el resultado. Al final, a pesar de que el sistema internacional de cuentas nacionales (SCN) recomienda que las ISFLSH se publiquen separadas de los hogares, en la práctica los usuarios de cuentas nacionales que quieren realizar comparaciones internacionales tienen, en la mayoría de los casos, que limitarse a comparar el agregado “hogares + ISFLSH” (es decir, S14 + S15), en lugar del solo sector S14.
Para los economistas, la función de “consumidores” del sector hogares es de gran interés, en la medida que el crecimiento económico está influenciado de manera directa e inmediata por el crecimiento del gasto de consumo final de los hogares, que a su vez está determinado por el ingreso disponible de los hogares y por la manera en que este ingreso se divide entre consumo y ahorro. Los términos en cursiva, en esta última frase, identifican los tres indicadores clave de la cuenta del sector hogares, que se definen en este capítulo.
6.1. Los tres indicadores fundamentales de las cuentas de los hogares
El Cuadro 6.1 muestra, como porcentajes del PIB, los rubros de gasto de Japón; los principales son: gasto de consumo final de los hogares; gasto de consumo final de las administraciones públicas; formación bruta de capital, y, por último, exportaciones. Un aumento, o disminución, del PIB puede provenir de uno cualquiera de estos componentes. Al describir la evolución de la economía japonesa, los economistas suelen decir que el crecimiento ha sido “impulsado por las exportaciones”, “impulsado” o “retardado” por el consumo, a veces incluso se hace referencia a si estuvo o no influenciado por una combinación de estos factores. No obstante, el Cuadro 6.1 pone claramente en evidencia el papel predominante que juega el gasto de consumo final de los hogares. Debido a que este gasto representa más del 55% del PIB, una variación de este agregado tiene que tener una importancia notable en el crecimiento del principal agregado macroeconómico.
Cuadro 6.1. Japón: Usos finales
Como porcentajes del PIB
Código |
Transacción |
2010 |
2011 |
2012 |
---|---|---|---|---|
B1_GE |
Producto Interno bruto (enfoque del gasto) |
100.0 |
100.0 |
100.0 |
P31S14 |
Gasto de consumo final de los hogares |
58.0 |
59.1 |
59.5 |
P31S15 |
Gasto de consumo final de las ISFLSH |
1.2 |
1.4 |
1.5 |
P3S13 |
Gasto de consumo final del gobierno general |
19.7 |
20.4 |
20.5 |
P5 |
Formación bruta de capital fijo |
19.8 |
20.0 |
20.6 |
P6 |
Exportaciones de bienes y servicios |
15.2 |
15.1 |
14.7 |
P7 |
(-) Importaciones de bienes y servicios |
14.0 |
16.1 |
16.6 |
Fuente: OECD (2013), Gross domestic product – Aggregate National Accounts, OECD National Accounts Statistics (database), http://dx.doi.org/10.1787/data-00001-en.
Obviamente son muchas las razones por las que un hogar puede decidir incrementar, o reducir, su consumo. En primer lugar están las variaciones del ingreso o la realización de ganancias o pérdidas en sus inversiones financieras o inmobiliarias. Sin embargo, el nivel de consumo también está influenciado por las perspectivas que tienen los hogares sobre su futuro inmediato: la posibilidad de un aumento o disminución del ingreso; la percepción del riesgo de desempleo; las expectativas de inflación. La influencia del comportamiento del consumidor en el PIB incita a los economistas a seguir de cerca los indicadores del “estado de ánimo de los hogares”, que son el resultado de encuestas de opinión en las que se pregunta a los consumidores si tienen confianza en el futuro, si esperan realizar pronto compras importantes y si creen que su situación financiera ha mejorado o se ha deteriorado en los últimos tiempos.
Se debe mencionar una segunda característica: La importancia de la formación bruta de capital; una parte sustancial de ella es la adquisición de viviendas, que está directamente relacionada con los hogares y se contabiliza como formación bruta de capital fijo (FBCF) del sector. Esta inversión se financia parcialmente con el ahorro de los hogares.
El segundo indicador fundamental, el ahorro de los hogares, representa un importante porcentaje del total del ahorro en las economías de los países de la OCDE (más del 50%). El Cuadro 6.2 muestra la proporción del ahorro total originado en los hogares y las ISFLSH, en el caso de Japón. Esta proporción ha sido tradicionalmente alta en el Japón, pero llegó al 75% en el año 2010. Refleja una situación post-crisis, cuando el déficit del gobierno había alcanzado niveles nunca antes vistos (ahorro negativo) al igual que el superávit de las empresas (ahorro positivo). Las sumas ahorradas por los hogares están disponibles para financiar la formación bruta de capital de otros sectores (maquinaria, fábricas, equipos de transporte, carreteras, autopistas, redes de comunicación, etc.) y también, en parte, la FBCF de los propios hogares (adquisición de viviendas). Desde el final de la Segunda Guerra Mundial ha habido una clara relación causal entre el nivel del ahorro de los hogares y la cuantía del incremento del PIB.
Cuadro 6.2. Japón: Participación del ahorro neto en la economía interna por sectores
En porcentajes del ahorro total neto
1980 |
1990 |
2000 |
2010 |
||
---|---|---|---|---|---|
B8N-S1 |
Total de la economía |
100.0 |
100.0 |
100.0 |
100.0 |
B8N-S11_S12 |
Sociedades |
28.3 |
14.7 |
61.3 |
504.9 |
B8N-S13 |
Gobierno General |
10.1 |
34.8 |
-29.0 |
-479.7 |
B8N-S14-S15 |
Hogares e ISFLSH |
61.5 |
50.5 |
67.7 |
74.8 |
Fuente: OECD (2013), “Detailed National Accounts: Non-financial accounts by sectors, annual”, OECD National Accounts Statistics (database), http://dx.doi.org/10.1787/data-00034-en.
Los Estados Unidos son una excepción. Desde el final de la Segunda Guerra Mundial la tasa de ahorro de los hogares estadounidenses ha sido relativamente baja, en contraste con la elevada tasa de FBCF, lo que ha permitido que el PIB crezca de manera más o menos constante en este período. Esta situación se explica por la poderosa atracción que la economía americana ejerce sobre los inversionistas extranjeros. En otras palabras, los Estados Unidos han sido capaces de financiar su inversión con los ahorros de los inversionistas extranjeros.
Desde la óptica microeconómica el ahorro es también importante en tanto que proporciona a las familias seguridad financiera en caso de pérdida de trabajo o de enfermedad, además de asegurar una parte de la jubilación. El sistema de seguridad social, que ha venido gestionando de forma satisfactoria la protección contra estos riesgos, está en una difícil situación en muchos países de la OCDE, debido al progresivo envejecimiento de la población. En los últimos años, los economistas de la OCDE han venido recomendando, en los “Economic Survey” consagrados a varios países, que las autoridades ofrezcan a los hogares incentivos para el fomento del ahorro, con el fin de que, una vez jubilados, puedan financiar con sus propios medios una mayor parte de sus necesidades
El tercer indicador fundamental, el ingreso disponible de los hogares, es la suma del gasto de consumo final y del ahorro. Como se ha visto, por diversas razones, son deseables los aumentos en los dos componentes: un incremento de los gastos de consumo final de los hogares estimula el crecimiento del PIB, mientras que un incremento del ahorro permite la financiación parcial de la inversión y, al mismo tiempo, alivia la carga sobre el sistema de seguros sociales. Parece evidente que este resultado solo se puede alcanzar si se incrementa el ingreso de los hogares, y este incremento se debe, en gran medida, a la capacidad de la economía de alcanzar ganancias de productividad por medio de una utilización más eficiente de los factores de producción, es decir, del trabajo y del capital.
6.2. Las cuentas del sector hogares
Los tres indicadores a que se viene haciendo referencia están explícitamente identificados en las cuentas del sector hogares. Es esencial tener en cuenta que, en lo que sigue en el resto del libro, estas cuentas e indicadores se expresan a precios corrientes y no en términos de volumen.
La secuencia de las cuentas de los hogares se divide en cuentas “no financieras” y cuentas “financieras”. Las cuentas financieras se tratan en el Capítulo 8. Por el momento se examina solamente la secuencia de las cuentas no financieras, empezando por la cuenta de producción y terminando con la cuenta de capital. Las cuentas que se van a mostrar tienen forma de T. Esta es de hecho la presentación adoptada por la mayoría de los hogares al registrar ingresos y gastos:
Gasto |
Ingreso |
---|---|
1. |
a) |
2. |
b) |
3., etc. |
c) etc. |
En cuentas nacionales los ingresos se denominan “recursos” y se colocan en la columna de la derecha, mientras que los gastos se denominan “usos” y se colocan en la columna de la izquierda. El último ítem de la columna de los usos es el “saldo contable”, o simplemente, “el saldo”, que es el monto necesario para equilibrar recursos y usos. Los saldos contables de las distintas cuentas (valor agregado, excedente de explotación, ingreso disponible, ahorro y capacidad de financiación/necesidad de financiación) son agregados particularmente interesantes para el análisis. A partir de ahora, en la presentación de las cuentas, estos elementos de balance se presentan en negrita.
Para entender completamente lo que contiene cada elemento de balance es necesario examinar la secuencia de cuentas que ha conducido a él. Por ejemplo, para responder a la pregunta: ¿Qué es el ahorro de los hogares?, es necesario examinar la serie de elementos que se han agregado, o sustraído del elemento inicial en la secuencia de cuentas. Esta noción se irá aclarando a medida que se progrese en el examen de las cuentas del sector de los hogares.
Para dar una idea de la importancia de los distintos elementos, se ha escogido el ejemplo de las cuentas de los hogares de Italia en 2012 (en miles de millones de euros, a precios corrientes). Los cuadros presentan el código de cada transacción (por ejemplo, P1 para la producción). Estos son los códigos empleados en los manuales internacionales (SCN 2008 y SEC 2010).
La letra inicial de cada código está basada en una terminología “Euro parlante”. “P” indica producción; “D” transacciones de redistribución; “F” transacciones financieras; “B” saldos (balance); y “K” (proveniente de la palabra alemana “Kapital”) indica elementos de acumulación de capital. Estos códigos cortos y definidos con precisión son muy útiles.
La cuenta de producción
La primera cuenta de la secuencia es la cuenta de producción. Es una cuenta muy reducida que se compone, en principio, de tres ítems: producción, consumo intermedio y el primer saldo contable, es decir, el valor agregado bruto, que es la diferencia entre los otros dos ítems. En el primer cuadro de los que figuran a continuación, se toma el sector agregado “Hogares más ISFLSH” para ilustrar el hecho que algunos países publican las cuentas de estos dos sectores con esta presentación. Una posible novedad respecto a lo que se ha venido reseñando es la inclusión del ítem “valor agregado neto”, que es igual al valor agregado bruto menos el consumo de capital fijo.
Cuadro 6.3. Italia: Cuenta de producción de los hogares y las ISFLSH (S14 + S15)
Miles de millones de euros, 2012
Usos |
Recursos |
||
---|---|---|---|
P2. Consumo intermedio |
136.6 |
P1. Producción |
543.7 |
B1G. Valor agregado bruto |
407.1 |
||
K1P1. Consumo de capital fijo |
89.6 |
||
B1N. Valor agregado neto |
317.5 |
Fuente: ISTAT (2013), “National Accounts: Annual sector accounts”, I.Stat (database), http://dati.istat.it/Index.aspx?DataSetCode=DCCN_SEQCONTIASA&Lan.
Si se excluyeran a las ISFLSH y se presentara exclusivamente la cuenta de producción de los hogares (S14), se obtendría la cuenta que figura a continuación. Se puede comprobar, por diferencia, que la importancia de las ISFLSH es muy reducida por lo que se van a ignorar a partir de ahora.
Cuadro 6.4. Italia: Cuenta de producción de los hogares (S14)
Miles de millones de euros, 2012
Usos |
Recursos |
||
---|---|---|---|
P2. Consumo intermedio |
133.4 |
P1. Producción |
536.2 |
B1G. Valor agregado bruto |
402.9 |
||
K1P1. Consumo de capital fijo |
89.3 |
||
B1N. Valor agregado neto |
313.6 |
Fuente: ISTAT (2013), “National Accounts: Annual sector accounts”, I.Stat (database), http://dati.istat.it/Index.aspx?DataSetCode=DCCN_SEQCONTIASA&Lan.
Las partidas de esta cuenta de producción de los hogares muestran las actividades de las empresas individuales: explotaciones agrícolas, puntos de venta al por menor, empresas de taxis, salones de belleza, etc. Pero también incluyen la producción de bienes por cuenta propia por los hogares, y los servicios de alojamiento “producidos” por quienes alquilan alojamientos a otros, o que son propietarios de la vivienda (casa o apartamento) donde residen. Como consecuencia, el ítem “producción”, del lado derecho de la cuenta, incluye los alquileres imputados a estos “propietarios-ocupantes”, mientras que el consumo intermedio, del lado izquierdo, incluye (además del consumo intermedio de las empresas individuales) los gastos de mantenimiento que tienen los propietarios de esos alojamientos.
Cuenta de generación del ingreso
La siguiente cuenta en la secuencia es la de generación del ingreso, que muestra cómo el valor agregado se distribuye entre la remuneración a los factores de producción, trabajo y capital. Comienza mostrando en la columna de los recursos, que figura a la derecha, el saldo de la cuenta precedente, en este caso, el valor agregado neto.
Cuadro 6.5. Italia: Cuenta de generación del ingreso de los hogares (S14)
Miles de millones de euros, 2012
Usos |
Recursos |
|||
---|---|---|---|---|
D1 |
Remuneración de los asalariados |
50.1 |
B1N. Valor agregado neto |
313.6 |
D11. Sueldos y salarios |
40.9 |
|||
D12. Contribuciones sociales de los empleadores |
9.2 |
|||
D2 |
Otros impuestos netos sobre la producción |
20.7 |
||
D3 |
(-) Subsidios |
-3.8 |
||
B2N. |
Excedente neto de explotación |
72.9 |
||
B3N. |
Ingreso mixto neto |
173.7 |
Fuente: ISTAT (2013), “National Accounts: Annual sector accounts”, I.Stat (database), http://dati.istat.it/Index.aspx?DataSetCode=DCCN_SEQCONTIASA&Lan.
La columna de usos incluye dos ítems importantes: la remuneración de los asalariados y los impuestos netos sobre la producción. Cuando se deducen los montos de estos dos elementos del valor agregado se obtienen dos saldos denominados excedente neto de explotación e ingreso mixto neto.
La remuneración de los asalariados incluye en este caso solo a los empleados de las empresas individuales. La remuneración se concreta en sueldos y salarios en efectivo, ingresos en especie (alojamiento y comida gratuitos, por ejemplo) y las contribuciones sociales pagadas por los propietarios de las empresas individuales (empresas no constituidas en forma de sociedad) a favor de sus empleados. Por tanto, se puede comprobar que la remuneración de los asalariados no consiste exclusivamente en sueldos y salarios sino que representa el costo total del factor trabajo.
Los otros impuestos netos sobre la producción comprenden los impuestos que gravan la propiedad o la utilización de los factores de producción (trabajo y capital) –por ejemplo, los impuestos sobre la propiedad de edificios. La palabra “netos” significa que se han deducido las subvenciones a la producción. Obviamente, las subvenciones dan lugar a un incremento de los saldos contables ingreso mixto y excedente de explotación. En la cuenta de generación de ingreso de los hogares las subvenciones se pagan principalmente a los propietarios de explotaciones agrarias.
En el caso de los sectores sociedades no financieras e instituciones financieras, el saldo de esta cuenta consiste, exclusivamente, en el excedente neto de explotación, que mide la remuneración del capital utilizado en el proceso de producción, que es, en otras palabras, la principal medida del “beneficio” en las cuentas nacionales (véase el Capítulo 7). Sin embargo, la situación es más complicada en el caso del sector de empresas individuales, en las que les suele ser imposible separar la remuneración del capital de la remuneración del trabajo. Por ejemplo, en el caso de una familia que posee una tienda de venta al por menor, o una empresa familiar de taxis, una vez se han deducido del valor agregado la remuneración de los asalariados y los impuestos netos sobre la producción, lo que queda es tanto remuneración del capital invertido (en estos casos los locales, el equipamiento y los stocks o los vehículos) como la remuneración del trabajo realizado por los propietarios y sus familiares. A diferencia de los propietarios tanto de las sociedades no financieras como de las instituciones financieras, los propietarios de las empresas familiares no están obligados a mostrar en su balance el valor del capital fijo que utilizan – y, si se les obligara, sería prácticamente imposible que pudieran hacerlo, porque, por ejemplo, un taxi puede también utilizarse como vehículo familiar cuando no se necesita con fines profesionales y las instalaciones de los negocios pueden servir de alojamiento a miembros de la familia.
Esto explica por qué, cuando no es posible distinguir entre ingresos generados por el capital e ingresos generados por el trabajo, se denomina “mixto” al total de estos ingresos y el saldo contable de la cuenta de producción se denomina ingreso mixto neto. Por esta razón aparecen registrados 173.7 miles de millones de euros en la cuenta de generación de ingreso que se presentó más arriba. Sin embargo, hay un caso para el que no hay duda de que las rentas en cuestión son de capital, lo que obliga a crear un saldo contable que se denomina excedente neto de explotación. El caso en cuestión es el de la actividad imputada a los propietarios que habitan sus propias viviendas que, en el ejemplo que se viene siguiendo, suponen la mayor parte de los 72.9 miles de millones de euros de la cuenta.
Los macroeconomistas requieren, en ocasiones, que se distingan claramente, dentro del ingreso mixto, la remuneración del capital y la remuneración del trabajo que se han utilizado en el proceso de producción. Hay al menos dos métodos para atender esta demanda (véase la sección sobre “La descomposición del ingreso mixto bruto”, al final del capítulo, en las “Precisiones adicionales”).
Cuenta de asignación del ingreso primario
La siguiente cuenta de la secuencia es la cuenta de asignación del ingreso primario. Por ingreso “primario” se designa al ingreso generado por el proceso de producción propiamente dicho o por un proceso estrechamente relacionado con él. Por contraste, el ingreso “secundario” se compone del dinero transferido a, o desde, los hogares y que no está relacionado con la actividad productiva.
Cuadro 6.6. Italia: Cuenta de asignación del ingreso primario de los hogares (S14)
Miles de millones de euros, 2012
Usos |
Recursos |
||
---|---|---|---|
D4. Renta de la propiedad |
15.0 |
B2N.Excedente neto de explotación |
72.9 |
D41.Intereses |
10.6 |
B3N. Ingreso mixto neto |
173.7 |
D42. Renta de la tierra y de activos del subsuelo |
4.4 |
D1. Remuneración de los asalariados |
672.6 |
D11. Sueldos y salarios |
490.8 |
||
D12. Contribuciones sociales de los empleadores |
181.8 |
||
D4. Renta de la propiedad |
196.8 |
||
D41. Intereses |
52.1 |
||
D42. Renta distribuida de las sociedades |
124.6 |
||
D43. Utilidades reinvertidas de la inversión extranjera directa |
0.0 |
||
D44.Renta de la propiedad atribuida a los titulares de pólizas de seguro |
17.9 |
||
B5N. Saldo de ingresos primarios, neto |
1 100.9 |
D45. Otros ingresos |
2.1 |
Fuente: ISTAT (2013), “National Accounts: Annual sector accounts”, I.Stat (database), http://dati.istat.it/Index.aspx? DataSetCode=DCCN_SEQCONTIASA&Lan.
Empezando, como es habitual, en el lado de los recursos, aparece al principio de la columna el saldo de la cuenta precedente, ingreso mixto neto/excedente neto de explotación.
El ítem remuneración de los asalariados, que figura en la columna de los recursos, es más elevado que el que figura entre los empleos de la cuenta de generación de ingreso, lo que se debe a que comprende la remuneración recibida por todos los empleados en todas las empresas, en las administraciones públicas y en las instituciones sin fines de lucro – y no exclusivamente las que reciben los empleados en las empresas individuales –. Esta es el ítem de mayor importe del ingreso de los hogares. Como se ha visto más arriba, la remuneración de los asalariados representa el costo total del trabajo e incluye las contribuciones sociales pagadas por los empleadores a favor de sus empleados y también las contribuciones imputadas. Puede parecer extraño registrar que los hogares reciban contribuciones sociales. Para entender su fundamento se remite al lector a la sección sobre las “Contribuciones sociales efectivas y contribuciones sociales imputadas”, que figura al final de este capítulo, en las “Precisiones adicionales”.
El rubro “intereses” (D41), que figura entre los recursos de los hogares, incluye los intereses generados por las inversiones financieras de los hogares. El rubro D42 corresponde a los dividendos pagados por las sociedades a los hogares y a las rentas que los hogares “retiran de las cuasi-sociedades”. Este último ítem se reserva, en principio, para registrar los pagos a los propietarios de las unidades conocidas como “cuasi-sociedades”, que no son sociedades desde un punto de vista legal (y por lo tanto legalmente tampoco pueden distribuir dividendos), pero que tienen muchas similitudes con las sociedades. Este ítem es normalmente muy pequeño porque las cuasi-sociedades son bastante raras. Sin embargo, las cuentas nacionales italianas son especiales en este aspecto, debido a que las empresas individuales con más de cinco empleados se consideran “cuasi-sociedades” y, por tanto, se clasifican en el sector sociedades. El rubro D42, en el caso de Italia, se refiere, por tanto, al ingreso mixto de un grupo importante de pequeñas empresas individuales que, en otros países, se clasifican en el sector de los hogares1.
El rubro D44 corresponde a los intereses imputados recibidos por los hogares que tienen suscritas pólizas de seguro de vida, de los cuales, a diferencia de los intereses generados por los bonos o por las cuentas de ahorro, no pueden disponer libremente. La sección “Seguros”, que figura al final del capítulo, en las “Precisiones adicionales”, explica cómo se tratan el seguro de vida y otros tipos de seguros. Finalmente, el rubro D45 se compone de alquileres y cánones percibidos como contrapartida de la cesión del uso de terrenos y yacimientos (por ejemplo, de carbón o de otros minerales). Si los propietarios de estos terrenos y de estos yacimientos permiten que sean utilizados por otros en el proceso de producción, se les considera beneficiarios de una renta primaria. Por otra parte, los alquileres recibidos como contrapartida de la cesión del uso de un alojamiento (o de la utilización temporal de bienes de capital fijo, tales como bienes personales o vehículos), se consideran pagos por la compra de servicios. En consecuencia, están incluidos como producción en la cuenta de producción, y no figuran en el rubro D45.
La columna de usos de la cuenta incluye el rubro D4 “rentas de la propiedad” pagadas por los hogares. Obsérvese que el elemento intereses comprende los pagados por los hogares cuando contraen préstamos para financiar su consumo o la adquisición de vivienda, y los pagados por las empresas individuales, principalmente como consecuencia del endeudamiento que contraen para financiar la adquisición de maquinaria o locales.
Cuando los usos se restan de los recursos se obtiene como resultado el ingreso primario neto. Este ítem se lleva a la primera fila de la columna de recursos de la cuarta cuenta, que se denomina cuenta de distribución secundaria del ingreso.
Cuenta de distribución secundaria del ingreso
La cuenta de distribución secundaria del ingreso recoge las diversas transferencias que tienen lugar tras la asignación del ingreso primario, con la finalidad de corregir desigualdades sociales. Dada su función, también se podría llamar “cuenta de redistribución”. Las más importantes de estas transferencias se originan cuando el Gobierno decide redistribuir ingreso, de los hogares con mayores recursos a los hogares más necesitados, aunque las transferencias que figuran en esta cuenta pueden también incluir iniciativas privadas, principalmente regalos o donaciones de caridad y el envío de fondos por los trabajadores inmigrantes a sus familias residentes en sus países de origen.
Las transferencias registradas aquí se denominan “corrientes” (como opuestas a las transferencias de “capital”), bien porque proceden del ingreso corriente (y no del capital) o bien porque los beneficiarios las consideran como un elemento de su ingreso corriente.
Cuadro 6.7. Italia: Cuenta de distribución secundaria del ingreso de los hogares (S14)
Miles de millones de euros, 2012
Usos |
Recursos |
||
---|---|---|---|
D5. Impuestos corrientes sobre el ingreso, la riqueza, etc. |
199.7 |
B5N. Saldo de ingreso primario neto |
1 100.9 |
D61. Contribuciones sociales |
252.3 |
D61. Contribuciones sociales |
2.5 |
D6111. Contribuciones efectivas de los empleadores |
167.5 |
D62. Prestaciones sociales otras que transferencias sociales en especie |
345.1 |
D6112. Contribuciones sociales de los empleados |
40.4 |
D7. Otras transferencias sociales |
25.9 |
D6113. Contribuciones sociales de independientes y de desempleados |
30.1 |
D72. Indemnización de seguros generales |
17.6 |
D612. Contribuciones sociales imputadas |
14.3 |
D75 Transferencias corrientes diversas |
8.3 |
D62. Prestaciones sociales otras que transferencias en especie |
1.9 |
||
D7. Otras transferencias corrientes |
40.2 |
||
D71. Primas netas de seguros generales |
16.7 |
||
D75. Transferencias corrientes diversas |
23.4 |
||
= B6N. Ingreso disponible neto |
980.4 |
||
+ K1. Consumo de capital fijo |
89.3 |
||
B6G. Ingreso disponible bruto |
1 069.7 |
Fuente: ISTAT (2013), “National Accounts: Annual sector accounts”, I.Stat (database), http://dati.istat.it/Index.aspx?Data SetCode=DCCN_SEQCONTIASA&Lan.
El tercer rubro de la columna de recursos es D62. Prestaciones sociales distintas de las transferencias sociales en especie, que incluye transferencias sociales corrientes que benefician a los hogares (pensiones de jubilación, prestaciones por desempleo, prestaciones de maternidad y ayuda familiar, prestaciones por ausencia laboral por enfermedad). Es de anotar que estas transferencias no incluyen ni el reembolso de medicinas y servicios sanitarios ni las ayudas a la vivienda, que se consideran transferencias sociales en especie y que se registran en otra cuenta, como parte del ingreso disponible ajustado. Al final del capítulo se volverá sobre este último concepto.
Las prestaciones sociales (D62) se descomponen en “prestaciones de seguros sociales” y “prestaciones de asistencia social”. Las primeras se pagan por el sistema de seguridad social, que pertenece a las administraciones públicas, y por los planes de pensiones privados, como contrapartida a contribuciones abonadas con anterioridad. Las prestaciones de asistencia social intentan satisfacer el mismo tipo de necesidades que las prestaciones que otorgan el sistema de seguridad social y los planes de pensiones privados, pero los beneficiarios no han tenido que pagar ningún tipo de cotización y, además, estas prestaciones no constituyen un derecho de quienes las perciben. Algunas prestaciones de subsistencia otorgadas a demandantes de asilo o los ingresos mínimos pagados a gente muy pobre son ejemplos de prestaciones de asistencia social.
Los dos últimos rubros de la columna de recursos de esta cuenta incluyen las otras transferencias corrientes. Estas transferencias son de dos tipos: pagos a los hogares de las indemnizaciones de seguros de accidentes (incendio, robo, accidentes de carretera, etc.) y transferencias corrientes diversas (dinero enviado por parientes que residen en el extranjero y ayudas concedidas por instituciones sin fines de lucro a discapacitados o a familias desfavorecidas), y las ayudas otorgadas por el gobierno a hogares que son víctimas de inundaciones u otras catástrofes naturales.
El primer rubro de la columna de usos es D5. Impuestos corrientes sobre el ingreso, la riqueza, etc. Los impuestos corrientes sobre el ingreso comprenden el impuesto personal sobre el ingreso y los impuestos pagados por el “ingreso mixto” de las empresas individuales. Los impuestos corrientes sobre la riqueza son pagos regulares (normalmente anuales) realizados por los hogares, que gravan su patrimonio neto, o la riqueza neta (en el caso de Francia, este impuesto se denomina “impuesto de solidaridad sobre la fortuna”). Se debe tener en cuenta que los impuestos sobre las herencias no se incluyen en este grupo, puesto que, siendo pagos excepcionales, se registran como transferencias de capital.
El siguiente rubro en la columna de usos se denomina Contribuciones sociales. Como se explica al final del capítulo (en la sección “Contribuciones sociales efectivas e imputadas”, incluida en las “Precisiones adicionales”), este ítem comprende: las contribuciones pagadas por los empleadores a los fondos de seguros sociales, en nombre de sus asalariados; las contribuciones pagadas por los propios asalariados; las contribuciones sociales imputadas, y las contribuciones pagadas por los propietarios de las empresas individuales (también llamados “autónomos”).
El rubro Prestaciones sociales recoge los pagos directos por los empresarios individuales incluidos en el sector hogares a sus asalariados, que también forman parte del sector hogares. La contrapartida de estas prestaciones son contribuciones imputadas que figuran en el ítem D61 de recursos. De los 2.3 miles de millones que figuran en este último ítem, 1.8 miles de millones (importe de la rúbrica D62 de empleos) son la contrapartida de prestaciones sociales directas.
El último ítem de la columna de usos es Transferencias corrientes diversas. Las primas netas de seguros generales están constituidas por las primas pagadas al suscribir pólizas de seguros generales menos la remuneración estimada que los asegurados pagan por el servicio que les presta la compañía de seguros (para más detalles véase, al final de este capítulo, la sección “Seguros”, en el apéndice “Precisiones adicionales”). El ítem Transferencias corrientes diversas comprende las transferencias de fondos realizadas por los trabajadores extranjeros a sus familias residentes en sus países de origen, donaciones a instituciones sin fines de lucro y multas de tráfico y otras.
La diferencia entre recursos y usos es igual al ingreso disponible neto (IDN), indicador clave que representa el monto que queda a disposición de los hogares para consumir y para ahorrar, una vez tomada en cuenta la parte del costo de reposición del stock de capital existente del período. Se denomina “neto” porque los montos necesarios para la reposición de los activos de capital (viviendas y equipos de las empresas individuales) asignados al período ya han sido deducidos. Sin embargo, algunos analistas prefieren utilizar el ingreso disponible bruto (IDB), que es igual al IDN más el consumo de capital fijo. Una razón que puede explicar esa preferencia es la incertidumbre que conlleva la estimación del consumo de capital fijo, y en particular la falta de homogeneidad en las estimaciones que realizan los diversos países. Otra razón para preferir el IDB es que se puede analizar mejor que el IDN en términos de poder de compra y en relación con el consumo final en volumen. El poder de compra del IDB es igual al IDB deflactado por el índice de precios de los gastos de consumo de los hogares. Si el poder de compra del IDB se incrementa, significa que la IDB se está elevando más rápidamente que la inflación, y por tanto hay una posibilidad de que los hogares consuman más en términos reales.
Otro aspecto que debe considerarse en el IDN es que este agregado del ingreso de los hogares incluye elementos que, por construcción, están afectados a unos usos determinados, por lo que los hogares no pueden disponer libremente de ellos para destinarlos a consumo o a ahorro. Por ejemplo:
El rubro producción de la cuenta de producción incluye productos agrícolas retenidos por sus productores para su autoconsumo y los alquileres imputados de los propietarios que ocupan su propia vivienda. Como resultado, el valor agregado derivado de estas actividades, que acabará siendo un elemento del ingreso disponible, no puede ser asignado a usos distintos del consumo de productos de la agricultura y de servicios de alojamiento, respectivamente. En los países de la OCDE, el autoconsumo de productos agrícolas es casi insignificante, pero los alquileres imputados tienen montos muy considerables.
La remuneración de los asalariados, que figura en la cuenta de asignación del ingreso primario, incluye ingreso en especie, pero este ya ha sido “gastado” en los correspondientes bienes y servicios que se suministran a los asalariados.
Una parte del ingreso por intereses (D41.) que figura en la cuenta de asignación del ingreso primario, comprende los intereses imputados de las reservas gestionadas por las compañías de seguros de accidentes a favor de los suscriptores de las pólizas. Estos intereses imputados están destinados a remunerar una parte de los servicios prestados por las compañías de seguros de accidentes.
El último punto sobre el que hay que llamar la atención acerca del IDN es que el concepto de ingreso disponible que se utiliza en cuentas nacionales es distinto del concepto teórico definido por algunos economistas (véase, al final del capítulo, en las “Precisiones adicionales”, la sección “El ingreso en cuentas nacionales y en la teoría económica”). En particular, el IDN no incluye las pérdidas y ganancias en acciones o en activos reales.
Cuenta de utilización del ingreso disponible
El saldo ingreso disponible neto figura en la primera línea de la columna de recursos de la cuenta siguiente, que es la cuenta de utilización del ingreso disponible.
Cuadro 6.8. Italia: Cuenta de utilización del ingreso de los hogares (S14)
Miles de millones de euros, 2012
Usos |
Recursos |
||
---|---|---|---|
P3. Gastos de consumo final |
947.1 |
B6N. Ingreso disponible, neto |
980.4 |
D8. Ajuste por cambio en los derechos de pensión |
0.6 |
D8. Ajuste por los cambio en los derechos de pensión |
3.4 |
B8N. Ahorro neto |
36.2 |
Fuente: ISTAT (2013), “National Accounts: Annual sector accounts”, I.Stat (database), http://dati.istat.it/Index.aspx?Data SetCode=DCCN_SEQCONTIASA&Lan.
El ajuste que aparece en el segundo renglón de la columna de recursos (código D8.) es necesario por la forma en que, tanto los aportes a los fondos de pensiones, como las pensiones pagadas por estos fondos, se tratan en la cuenta de distribución secundaria del ingreso. En esa cuenta se asimilan ambos conceptos a las contribuciones pagadas al sistema de seguros sociales, y a las prestaciones recibidas de él, cuando debería haberse tratado igual que las operaciones de las compañías de seguros de vida. Se ha adoptado este tratamiento especial porque las contribuciones pagadas a los fondos de pensiones y las prestaciones recibidas de ellos, se perciben por los hogares de una forma similar a las contribuciones pagadas al sistema de seguridad social y a las prestaciones recibidas de él. En la medida que se estime que ambas operaciones tienen el mismo impacto sobre el comportamiento del consumidor parece lógico aplicarles el mismo tratamiento. Sin embargo, las operaciones de los fondos de pensiones también se registran en la cuenta financiera (véase el Capítulo 9). Por tanto, es necesario hacer un ajuste en las cuentas no financieras para que el valor del saldo (ahorro) que se transmite a las cuentas financieras sea correcto. El ajuste es igual a la variación de la participación neta de los hogares en las reservas de los fondos de pensiones y de ahí su nombre. Cuando se calcula la tasa de ahorro de los hogares es importante recordar que el rubro D8 debe añadirse al denominador de esta relación (ingreso disponible) puesto que está incluido en el numerador (ahorro).
La columna de usos de la cuenta de “utilización del ingreso disponible” contiene solo dos elementos importantes: el gasto de consumo final de los hogares y el saldo, el ahorro neto. En el Capítulo 5 se ha dado una definición completa de los gastos de consumo final de los hogares, pero cabe recordar que se compone principalmente de bienes y servicios de uso cotidiano (ropa, alimentos, bienes de consumo duradero, alquileres, transporte, servicios personales, etc.) más:
los alquileres imputados “pagados” por los propietarios que habitan sus propias viviendas;
el valor estimado de la producción por cuenta propia de los hogares, en particular las cosechas y los animales consumidos por los hogares propietarios de una explotación agrícola;
el valor estimado de los bienes y servicios recibidos por los asalariados a título de remuneración en especie.
Por otra parte, los gastos de consumo final de los hogares no incluyen:
las adquisiciones de viviendas que son activos fijos que se utilizan para producir servicios de alojamiento: se registran en la cuenta de capital (FBCF) y no se consideran consumo;
las adquisiciones de otros tipos de edificios y equipos que se utilizan principalmente para la producción por empresas familiares y son también FBCF (equipamientos agrícolas, instalaciones comerciales, taxis, vehículos utilitarios, etc.);
las adquisiciones por empresas familiares de bienes de consumo intermedio (semillas y fertilizantes, en el caso de explotaciones agrícolas; pintura y pinceles, en el caso de pintores de edificios; carburantes y gastos de mantenimiento, en el de los taxistas, etc.) son consumo intermedio y no consumo final;
las compras (menos las ventas) de “objetos valiosos” – incluyendo monedas de oro, antigüedades, sellos raros y obras de arte – adquiridos para servir como “depósitos de valor”; se consideran inversión de los compradores, que esperan que su valor se incremente a lo largo del tiempo (o, como mínimo, no disminuya).
El saldo, el ahorro neto, que es la diferencia entre el IDN y el consumo, es el tercer indicador clave de las cuentas de los hogares. Se obtiene como diferencia entre dos grandes agregados, y por ello está casi siempre afectado por errores. Incluso un ajuste relativamente pequeño en uno u otro de los dos agregados que definen el ahorro – el ingreso disponible y el gasto final de los hogares – motiva automáticamente un ajuste relativamente sustancial del saldo. En consecuencia, es necesario tomar con reservas las primeras estimaciones que se difunden sobre la evolución del ahorro, porque, con toda seguridad, se revisarán sustancialmente en los dos o tres años siguientes.
En la práctica, los analistas están más interesados en la tasa de ahorro de los hogares que en el nivel de este agregado. La tasa de ahorro de los hogares viene dada por el ahorro de los hogares dividido por el ingreso disponible (al cual se añaden los ingresos del ajuste D8.). Para facilitar las comparaciones internacionales es fundamental utilizar las mismas definiciones. El método preferido por la OCDE es utilizar el ahorro neto. El siguiente cuadro muestra la tasa de ahorro neto de los hogares de Italia y de otros países industrializados en los últimos años.
Cuadro 6.9. Tasa de ahorro neto de los hogares
Como porcentaje del ingreso disponible
2006 |
2007 |
2008 |
2009 |
2010 |
2011 |
2012 |
|
---|---|---|---|---|---|---|---|
Francia |
11.2 |
11.7 |
11.7 |
12.6 |
12.1 |
12.2 |
|
Alemania |
10.8 |
11.0 |
11.5 |
10.9 |
10.9 |
10.4 |
10.3 |
Italia |
9.5 |
8.9 |
8.5 |
7.1 |
4.9 |
4.3 |
3.6 |
Japón |
1.3 |
1.1 |
0.6 |
2.3 |
2.1 |
2.3 |
|
Estados Unidos |
3.5 |
3.2 |
5.2 |
6.4 |
5.9 |
5.9 |
5.8 |
Fuente: OECD (2014), “Detailed National Accounts: Non-financial accounts by sectors, annual”, OECD National Accounts Statistics (database), http://dx.doi.org/10.1787/data-00034-en.
Cuenta de capital
El saldo de la cuenta de utilización del ingreso de los hogares, el ahorro neto, se toma como primera línea de los recursos de la cuenta de acumulación de capital, que es la última de las cuentas no financieras de la secuencia de cuentas. Debido a que la formación bruta de capital fijo figura entre los usos, es preferible que esta cuenta se elabore en términos brutos. Por esta razón se ha incluido entre los recursos el ahorro bruto, agregado que es igual al ahorro neto más el consumo de capital fijo.
Cuadro 6.10. Italia: Cuenta de acumulación de capital para los hogares (S14)
Miles de millones de euros, 2012
Usos |
Recursos |
||
---|---|---|---|
P51. Formación bruta de capital fijo |
102.0 |
B8N. Ahorro neto |
36.2 |
P52. Cambio en inventarios |
0.8 |
K1. Consumo de capital fijo |
89.3 |
P53. Adquisiciones menos disposiciones de objetos valiosos |
2.3 |
B8. Ahorro bruto |
125.5 |
K2. Adquisiciones menos disposiciones de activos no financieros no producidos |
0.1 |
D9. Transferencias de capital netas recibidas |
-0.1 |
B9. Capacidad (+) Necesidad (-) de financiación |
20.1 |
Fuente: ISTAT (2013), “National Accounts: Annual sector accounts”, I.Stat (database), http://dati.istat.it/Index.aspx?Data SetCode=DCCN_SEQCONTIASA&Lan.
El otro elemento de la columna de recursos es el D9. Transferencias netas de capital recibidas. La palabra “netas” indica que las transferencias de capital pagadas se han restado de las transferencias de capital recibidas. Las recibidas incluyen ayudas a la inversión y las pagadas comprenden, fundamentalmente, impuestos de sucesiones. En algunos países, las transferencias de capital recibidas incluyen también un ajuste entre impuestos y contribuciones sociales por cobrar y los impuestos y contribuciones sociales por pagar.
El ahorro bruto se usa para adquirir activos financieros y no financieros. Los primeros cuatro ítems de la columna de usos corresponden a la adquisición de activos no financieros. El primero de estos, la formación bruta de capital fijo, comprende la adquisición de viviendas y de equipamiento (por las empresas individuales), las huertas y las plantaciones de viñedos y de madera, entre otras cosas. La variación de existencias comprende stocks de productos terminados y bienes de consumo intermedio en poder de las empresas individuales. Los objetos valiosos son objetos tales como metales preciosos, antigüedades y obras de arte, que se han adquirido para servir como depósitos de valor y cuya compra se considera una “inversión”, que se realiza, a veces, con el propósito de revenderla. Los activos no financieros no producidos comprenden los recursos naturales (tierra y recursos del subsuelo) los contratos, arrendamientos y otros contratos que se pueden ceder, que confieren a sus titulares el derecho a utilizar terrenos, edificios o yacimientos minerales.
El saldo contable B9. Capacidad (+)/Necesidad (–) de financiación (que también se designa como B9. Préstamo neto) recoge el monto disponible para la adquisición de activos financieros (por ejemplo, para la constitución de un depósito en una cuenta de ahorro) o para la cancelación de un préstamo (por ejemplo, para la amortización de un préstamo al consumo que financia la adquisición de un automóvil o la amortización de un préstamo hipotecario que financia la adquisición de una vivienda). Este monto es casi siempre positivo para el conjunto del sector hogares en su conjunto. Sin embargo, en algunos casos, tales como el de Irlanda y España en los años recientes, los hogares se han convertido temporalmente en deudores netos por la burbuja de la finca raíz. Al “préstamo neto” se le denomina “ahorro financiero”. Algunos países publican una “tasa de ahorro financiero”, que es igual a la capacidad de financiación de los hogares dividida por su Ingreso Disponible Bruto (multiplicado por 100).
6.3. Una forma alternativa de medir el ingreso disponible de los hogares y el consumo
El sistema internacional de cuentas nacionales (SCN 2008) propone un método alternativo para medir el ingreso disponible de los hogares y el consumo que toma en consideración el gasto de las administraciones públicas y las ISFLSH en beneficio de los hogares.
La idea que subyace en esta vía alternativa es que el gasto final de las administraciones públicas y el de las ISFLSH financian dos categorías de servicios completamente diferentes: servicios colectivos, cuya finalidad es beneficiar al conjunto de la sociedad, y servicios que utilizan individualmente determinados miembros de la sociedad. Son ejemplos de servicios colectivos la defensa, el orden público, la recaudación de impuestos, el control del gasto público, la supervisión de la calidad del aire y de la polución del agua, la preparación y promulgación de leyes y la administración pública en general. En teoría, es la sociedad en su conjunto la que se beneficia de estos servicios, y es imposible calcular en qué medida los utiliza un hogar concreto.
Los “servicios individuales” suministrados por el gobierno general incluyen la salud, la educación, los servicios sociales, los servicios de alojamiento y los servicios recreativos y culturales. En principio es posible calcular en estos casos en qué medida se hace uso de ellos en determinados hogares individuales. Los hogares utilizan estos servicios con diferente intensidad, dependiendo de su situación. Por ejemplo, a diferencia de las familias con muchos hijos, los hogares sin niños no harán gran uso de los servicios de educación. De forma similar, el consumo de servicios de salud depende de la frecuencia con la que se enferman los miembros de un hogar.
El SCN 2008 incluye estos servicios individuales, junto con otras transferencias, en una cuenta alternativa del ingreso de los hogares denominada cuenta de redistribución del ingreso en especie, en cuya columna de recursos se recoge el valor de estos servicios bajo la denominación de transferencias sociales en especie.
Las transferencias sociales en especie incluyen los gastos en que incurren el gobierno general y las ISFLSH al prestar los diversos servicios individuales que se han mencionado más arriba (salud, educación, etc.), pero también los reembolsos que hace la administración a los hogares por compras de bienes y servicios, tales como consultas médicas y medicinas y ayudas a la vivienda. El saldo ingreso disponible neto ajustado es igual al ingreso disponible, medido de la manera habitual, más las transferencias sociales en especie.
Cuadro 6.11. Italia: Cuenta de redistribución del ingreso de los hogares
Miles de millones de euros, 2012
Usos |
Recursos |
||
---|---|---|---|
B6N. Ingreso neto disponible |
980.4 |
||
B7N. Ingreso neto disponible ajustado |
1 173.3 |
D63. Transferencias sociales en especie |
192.8 |
Fuente: ISTAT (2013), “National Accounts: Annual sector accounts”, I.Stat (database), http://dati.istat.it/Index.aspx?DataSetCode=DCCN_SEQCONTIASA&Lan.
En la medida que se dispone de este método alternativo de medir el ingreso disponible, es lógico que se cree una nueva cuenta en la que se ilustra esta nueva medida del ingreso. A esta nueva cuenta se la denomina cuenta de utilización del ingreso disponible ajustado.
Cuadro 6.12. Italia: Cuenta de utilización del ingreso disponible ajustado de los hogares (S14)
Miles de millones de euros, 2012
Usos |
Recursos |
||
---|---|---|---|
P41. Consumo individual efectivo |
1 139.9 |
B7N. Ingreso neto disponible ajustado |
1 173.3 |
D8. Ajuste por el cambio en los derechos de pensión |
36.2 |
D8. Ajuste por el cambio en los derechos de pensión |
3.4 |
B8N. Ahorro neto |
36.2 |
Fuente: ISTAT (2013), “National Accounts: Annual sector accounts”, I.Stat (database), http://dati.istat.it/Index.aspx?Data SetCode=DCCN_SEQCONTIASA&Lan.
El primer renglón de la columna de usos es el consumo individual efectivo. Obsérvese que no se hace ahora mención del “gasto”. El consumo individual efectivo mide el valor de los bienes y servicios efectivamente consumidos por los hogares, incluyendo los bienes y servicios que han sido financiados por el gobierno general y por las ISFLSH. Este valor adicional es igual a la parte del consumo de las administraciones públicas y las ISFLSH que puede considerarse “individual”, según se ha descrito en los capítulos precedentes.
Hay que tener en cuenta que el saldo de esta cuenta alternativa, el ahorro neto, es idéntico al saldo de la presentación tradicional de la cuenta de los hogares. Esto se explica porque tanto el ingreso disponible ajustado como el consumo final efectivo se han incrementado en el mismo monto (el valor de las transferencias sociales en especie), por lo que la diferencia entre los dos conceptos, es decir, el ahorro, permanece invariable. Según se mencionó en el Capítulo 3, los conceptos de ingreso disponible ajustado y de consumo individual efectivo son útiles especialmente en comparaciones internacionales.
Referencias
EC, IMF, OECD, UN and WB (2009), System of National Accounts 2008, New York, https://unstats.un.org/unsd/nationalaccount/docs/sna2008.pdf.
ISTAT (2013), “National Accounts: Annual sector accounts”, I.Stat (database), http://dati.istat.it/Index.aspx?DataSetCode=DCCN_SEQCONTIASA&Lan.
OECD (2014), “Detailed National Accounts: Non-financial accounts by sectors, annual”, OECD National Accounts Statistics (database), http://dx.doi.org/10.1787/data-00034-en.
OECD (2013), “Aggregate National Accounts: Gross domestic product”, OECD National Accounts Statistics (database), http://dx.doi.org/10.1787/data-00001-en.
Puntos clave
Un hogar es un grupo de personas que se ocupan colectivamente de su alimentación y alojamiento. Un hogar se compone de una o más personas que viven bajo el mismo techo, y que, generalmente, están ligadas por lazos familiares.
La función principal del sector hogares es consumir, pero también realiza una función productiva.
La producción del sector hogares comprende la de las empresas individuales (es decir, las empresas no constituidas en sociedad) y la de los hogares que producen su propio servicio de alojamiento (propietarios que habitan en su propia vivienda).
El “ingreso disponible bruto” (IDB) y el “ingreso disponible neto” (IDN) son los saldos contables más importantes para analizar la situación de los hogares pues reflejan los montos disponibles para el consumo y para el ahorro.
El factor determinante de la evolución del volumen de bienes y servicios consumidos por los hogares es la evolución del poder de compra del ingreso disponible bruto.
El ahorro es igual al ingreso disponible menos los gastos de consumo, o también, el ingreso disponible ajustado menos el consumo individual efectivo. El ahorro financiero es otra de las denominaciones de la capacidad de financiación y del préstamo neto, en este caso, del sector hogares.
La tasa de ahorro bruto es igual al ahorro bruto dividido por el IDB (más el ítem D8). La tasa de ahorro neto es igual al ahorro neto dividido por el IDN (más el ítem D8).
Las transferencias sociales en especie son iguales al consumo “individual” del gobierno general y de las ISFLSH.
Precisiones adicionales
La conformación del ingreso mixto bruto
Los economistas se apoyan en las cuentas nacionales para medir los cambios en la participación de los salarios y las utilidades dentro del valor agregado y también para medir los cambios de la productividad a lo largo del tiempo y entre diferentes países (véase la introducción del Capítulo 4). Para llevar a cabo sus análisis necesitan distinguir en las cuentas nacionales entre los rendimientos de estos dos factores de producción, tanto para las empresas individuales como para las sociedades. Por esta razón tratan de desagregar el ingreso mixto en sus dos componentes: el salario implícito de los propietarios y la rentabilidad del capital.
Hay dos maneras de estructurar la composición del ingreso mixto de las empresas individuales. La primera consiste en estimar la remuneración de los empleados y los ayudantes familiares. En este caso, el rendimiento del capital se obtiene por diferencia entre el ingreso mixto y las remuneraciones estimadas. El segundo método se basa en la estimación del rendimiento del capital, suponiendo que el resto del ingreso mixto es el rendimiento del trabajo. Generalmente el primer método se basa en el número de trabajadores autónomos derivado de las encuestas de salarios o de registros administrativos, y del censo de población, suponiendo que estos trabajadores reciben la misma remuneración media que los trabajadores dependientes empleados en actividades similares. El segundo método se basa en una estimación del stock de capital fijo utilizado por las empresas individuales, ajustándolo a la baja para tener en cuenta que este capital también se puede utilizar con fines privados. Para obtener el rendimiento del capital, se aplican a los activos de las empresas individuales las tasas promedio de rendimiento de activos similares en poder de las sociedades constituidas como tales.
En teoría, estos dos métodos son igualmente válidos, pero en la práctica el que se utiliza es el primero, probablemente porque los datos que se necesitan para aplicarlo son más fáciles de obtener. Obviamente, estos dos métodos pueden utilizarse de manera simultánea, pero en este caso el total obtenido para el rendimiento del trabajo más el rendimiento del capital suele ser mayor – a veces considerablemente mayor – que el ingreso mixto registrado en las cuentas. Una posible explicación es que los propietarios de las empresas individuales ganan una “renta psicológica” concretada en la satisfacción que experimentan por ser sus propios jefes, por lo que aceptan una remuneración menor por su trabajo y por su inversión de capital de la que obtendría una sociedad.
Contribuciones sociales efectivas y contribuciones sociales imputadas
La “remuneración de los asalariados” se define en cuentas nacionales de manera que muestra explícitamente el costo total del trabajo como factor de producción. Por ejemplo, mientras en el mundo real las contribuciones sociales las pagan directamente los empleadores a los sistemas de seguros sociales, sin intervención de los asalariados, las cuentas nacionales las tratan como parte de los salarios pagados a los hogares. Como resultado el ítem “remuneración de los asalariados” comprende todas las contribuciones, incluyendo las contribuciones imputadas (ver más adelante), y por tanto refleja el costo total del trabajo. Los equilibrios finales de las cuentas obligan a que entre los usos de la “cuenta de distribución secundaria del ingreso” se incluya otro flujo ficticio que, en este caso, sale de los hogares con destino a los organismos de seguros sociales, de donde se concluye que las contribuciones sociales pasan por el siguiente circuito ficticio: Empleador → Hogares → Sistema de seguros sociales. Es muy importante tener en mente este circuito cuando se interpreten las cuentas de los hogares.
En la mayoría de los países, los asalariados y los empleadores están obligados a cotizar regularmente a un plan de seguro social, que reembolsa generalmente a los empleados los gastos en salud, paga prestaciones de desempleo y proveen pensiones de jubilación. Sin embargo, al margen del circuito de los seguros sociales, algunos empleadores pagan directamente prestaciones sociales a sus asalariados. En esta situación los contables nacionales consideran que estos asalariados y empleadores pagan una contribución social “imputada”. Estiman su monto teniendo en cuenta lo que los trabajadores hubieran tenido que haber pagado para recibir las citadas prestaciones sociales. Estas contribuciones sociales imputadas también se pagan por los empleadores a los asalariados como parte de la “remuneración de los asalariados”. De este modo el costo total del trabajo aparece registrado en las cuentas. Las prestaciones que los hogares reciben de los empleadores se registran en la columna de recursos de la “cuenta de distribución secundaria del ingreso”, junto a las restantes prestaciones sociales. Como es difícil estimar las hipotéticas contribuciones que estos trabajadores tendrían que haber pagado a sus empleadores para recibir las prestaciones que estos les otorgan directamente, los contables nacionales suponen que las contribuciones sociales imputadas son equivalentes a las prestaciones efectivamente recibidas. Sin embargo, cada vez más contables nacionales estiman las contribuciones sociales relacionados con los esquemas de pensión definida (financiados o no) basándose en cálculos actuariales del costo de las futuras pensiones y no en contribuciones efectivas, lo cual introduce un elemento adicional de imputación.
Fondos de pensiones y sistemas de seguridad social
Un asunto complicado, especialmente para las comparaciones internacionales, es el registro de las contribuciones y de las prestaciones que reciben en contrapartida los empleados. Se pueden distinguir dos tipos de sistemas de pensiones: los que funcionan como “planes de ahorro” (también llamados sistemas de contribución definida, aunque también podrían ser de prestación definida cuando se manejan en un esquema de seguros sociales) y aquellos que funcionan como “planes de transferencia” (también llamados “de reparto”, aunque también se podrían llamar sistema de prestación definida o, de pago sin estructuración formal de reservas individualizadas, en inglés, “pay as you go”). Si el plan de pensiones es un plan de ahorro (lo que también se denomina un “fondo de pensiones”), cada asalariado contribuye al fondo del cual se pagará su futura pensión. De este modo, las cuentas nacionales registran todos los aportes al plan (tanto de los asalariados como de sus empleadores) como una forma de ahorro (esto es, como un incremento de las reservas de pensiones de los asalariados y no como una contribución social), y el pago de las pensiones, como un “desahorro” (esto es, como una disminución de los activos pensionales de los pensionados).
Por el contrario, un plan de pensiones es un plan de transferencia (en lugar de un plan de ahorro) cuando las contribuciones de los empleados activos se utilizan para pagar las pensiones de los ya jubilados. En este caso (característico del régimen de pensiones de los sistemas de seguridad social), los contables nacionales deducen del ingreso las contribuciones que otorgan derecho a pensión (y, por tanto, también las deducen del ahorro), mientras que las prestaciones de jubilación, es decir, las pensiones, se consideran parte del ingreso (y, por tanto, se incluyen en el ahorro). Por consiguiente, hay una diferencia significativa en el impacto que tienen estos dos métodos de financiar el retiro de los empleados. Para armonizar la medición del ingreso, el SCN 2008 recomienda registrar también (en paralelo), las contribuciones y las prestaciones de los planes de ahorro (esto es, fondos de pensiones), como si fueran planes de transferencias (esto es, sistemas de seguridad social). Sin embargo, esta contabilización crea una asimetría en las cuentas que tiene que corregirse añadiendo el ítem “D8 ajuste por la variación en los derechos de pensión” en la cuenta de utilización del ingreso disponible. Debe tener en cuenta que los EE.UU., Canadá y Australia – tres países grandes con fondos de pensión – no registran este ítem porque no utilizan la contabilización paralela que la genera.
Debido a los grandes problemas financieros que causa el retiro inminente de la llamada generación del baby-boom (los nacidos entre 1945 y 1950 principalmente en Europa), muchos países están llevando a cabo importantes reformas de los sistemas de pensiones. Estas reformas van en dos direcciones: primera, reducir los compromisos de pensiones y/o elevar los aportes; segunda, transformar los “planes de prestaciones definidas” en “planes de contribuciones definidas”. Esto último necesita una explicación.
Un plan de prestaciones definidas es un plan de pensiones para el cual la prestación en que se concreta la pensión se calcula en términos de un porcentaje del salario final. En este tipo de plan es el promotor, normalmente el empleador, quien soporta el riesgo financiero de las citadas prestaciones. Los planes de prestaciones definidas son normalmente sistemas de reparto, que, por tanto, no constituyen reservas. Los sistemas de jubilación al amparo de los regímenes de seguridad social vigentes en la mayoría de los países de Europa continental son planes de prestaciones definidas sin constitución de reservas.
Por el contrario, los planes de contribuciones definidas son planes de ahorro: la prestación en que se concreta la pensión es el resultado de la acumulación de los aportes realizados por los asalariados y por los empleadores a favor de sus asalariados. Como consecuencia, el empleador no soporta el riesgo financiero de los compromisos de pensiones. Por definición, los planes de contribuciones definidas constituyen reservas, lo que implica que mantienen activos, financieros o no financieros, que son el resultado de la inversión de los aportes acumulados. Es con cargo a estas reservas que se pagan las pensiones.
El SCN 2008 continúa siendo flexible sobre el registro de los planes de pensión sin fondos, lo que produce diferencias entre los países de la OCDE. Algunos países, de acuerdo con las recomendaciones de la contabilidad privada, registran todos los planes de prestación definida sin fondo por parte del empleador, como si se tratara de planes de ahorro, incluyendo los planes del gobierno para sus empleados. Esto requiere el cálculo de una obligación o pasivo pensional para estos planes (y por lo tanto de un activo pensional para los empleados) utilizando métodos actuariales. Los métodos actuariales para contabilizar las pensiones estiman los pasivos de pensiones contraídos en los planes de prestaciones definidas, basándose en los datos demográficos de los asalariados, a partir de los cuales se calculan los fondos que se espera tenga que inyectar el empleador para realizar el pago de las pensiones. Estos fondos se transforman en un pasivo del período y se descuentan utilizando una tasa de descuento. Algunos países (principalmente los de Europa continental) continúan registrando los planes de pensión como planes con un esquema “pay-as-you-go”. Como resultado, no hay comparabilidad completa de los datos para los flujos de pensiones y de los pasivos pensionales entre países de la OCDE. El SCN 2008 insta a los países a producir un cuadro complementario donde todos los pagos de pensiones y todos los pasivos pensionales aparezcan en forma comparable. Sería prematuro concluir que esta tabla tan útil estará disponible en todos los países de la OCDE. Los países de la U.E. tienen la obligación, de acuerdo con los términos del programa de transmisión del ESA 2010, de producir esta tabla para 2017. Ojalá,pues si otros países de la OCDE logran el mismo objetivo, será finalmente posible la comparabilidad completa de los flujos y de los pasivos pensionales.
Seguros
Se distinguen dos tipos de seguro: el seguro de no vida (también denominado como seguro general) y el seguro de vida. En el seguro general, el tomador de la póliza, es compensado por robos, accidentes de carretera, incendios, catástrofes naturales, daños físicos, pérdidas de ingreso, etc. Estos seguros comprenden también un tipo de seguro de “vida”, que sería más adecuado llamar de “muerte”. Consiste en una póliza en la que la compañía de seguros acuerda pagar a los beneficiarios designados por la persona asegurada una suma determinada, en caso del fallecimiento de esta última (en el caso de seguro de vida “a término” la suma se paga antes de una determinada edad y a cualquier fecha, en el caso de un seguro de vida “vitalicio”). El seguro de vida a término no es más que una apuesta entre el tomador del seguro y la compañía de seguros. Si el tomador del seguro muere antes de la edad acordada, él “gana”, en el sentido que la compañía de seguros estará obligada a pagar un capital determinado a los beneficiarios designados. Por el contrario, si el tomador de la póliza continúa con vida a la edad acordada, es la compañía de seguros la que “gana”, en tanto que no tendrá que devolver nada como contraprestación a las primas que ha recibido del tomador del seguro durante el período de vigencia de la póliza. Este seguro funciona de forma similar a un seguro general y es completamente diferente del seguro de vida que se describe más adelante.
En el caso del seguro general, los contables nacionales dividen la prima pagada por el tomador en dos partes: la remuneración por el servicio prestado y la prima neta, esto es, el resto. La remuneración por el servicio prestado corresponde a lo que se estima que el asegurado paga a la aseguradora por la gestión de los fondos que esta recibe por concepto de primas, es decir, por el tratamiento de las demandas de indemnizaciones, por los servicios de asesoramiento y publicidad y por otros gastos corrientes. Por convención, se asume que el monto de la remuneración del servicio es igual a la diferencia entre las primas recibidas por las empresas y las indemnizaciones pagadas por ellas, más lo que se conoce como “la prima suplementaria”. Esta prima suplementaria corresponde a la renta de la propiedad recibida por las compañías de seguros por invertir las primas en activos financieros y, eventualmente, no financieros. Los contables nacionales consideran que esta renta pertenece a los asegurados. Por eso la muestran como “recibida” por los asegurados (en la columna de recursos de la cuenta de distribución del ingreso primario) y después la “restituyen” a las compañías de seguros, cuando les remuneran los servicios prestados. La remuneración de los servicios de seguro es parte de los gastos de consumo final de los hogares. Las primas netas (primas menos remuneración de los servicios) se tratan implícitamente como una transferencia entre los asegurados que pagan las primas y los asegurados que reúnen los requisitos necesarios para recibir las indemnizaciones. Las primas netas se registran en el rubro “otras transferencias corrientes” en la columna de usos de la cuenta de distribución secundaria del ingreso, mientras que las indemnizacionesse registran en el rubro “otras transferencias corrientes” en la columna de recursos de la misma cuenta.
El seguro de vida funciona de forma muy diferente al seguro general. Una póliza de seguro de vida es una de las posibles formas en que una persona puede constituir un capital, que le será restituido en una fecha acordada, incrementado por los intereses generados por la inversión de las primas. Una póliza de seguro de vida normalmente implica el pago regular de primas o contribuciones. El seguro de vida definido aquí es, por tanto, un plan de ahorro, según se ha definido en la sección anterior, y por tanto es similar a cualquier otra inversión financiera (por ejemplo, semejante a hacer un depósito en una cuenta de ahorro, adquirir acciones o guardar monedas de oro debajo del colchón).
Las contribuciones y los retiros que se realizan cuando vence la póliza (o el contrato), son operaciones financieras que se registran en la cuenta financiera (véase el Capítulo 8). No obstante, el seguro de vida hace aparecer dos operaciones no financieras que deben registrarse en las cuentas no financieras. Primero, al igual que en el caso de los seguros generales, el asegurado tiene que pagar a la compañía de seguros por el servicio de gestión de los fondos que esta ha recibido. La mayoría de las veces las compañías de seguros registran separadamente esta remuneración de los servicios, en cuyo caso no es necesario hacer estimaciones sobre su monto. Esta remuneración se incluye como tal entre los gastos de consumo final de los hogares. Segundo, a pesar de que las compañías de seguros retienen los intereses recibidos que han sido generados por la inversión de lo recaudado por concepto de primas, y a pesar también de que los asegurados no tienen acceso a ellos antes de que venzan las pólizas, estos intereses son, desde un punto de vista legal, propiedad de los asegurados. Por esta razón, tales intereses se registran en el rubro “renta de la propiedad”, que figura entre los recursos de la cuenta de distribución del ingreso primario de los hogares. Este proceder tiene no solo una justificación legal sino también una económica. Cuando una póliza (o un contrato) obtiene un rendimiento más alto de lo normal, el asegurado se siente más rico e incrementa su consumo (el llamado “efecto riqueza”), a pesar de que no va a recibir el dinero antes de la fecha fijada. Si el rendimiento es más bajo que el normal, el asegurado estará inclinadoa reducir el consumo.
El ingreso en las cuentas nacionales y en la teoría económica
Las cuentas nacionales definen el ingreso como un flujo de recursos netos que se originan en la actividad normal de producción, bien directamente, o bien mediante la redistribución, y que está potencialmente disponible para el consumo. Por otra parte, algunos economistas definen el ingreso de un hogar como la cantidad máxima de dinero que se puede gastar a lo largo de un período, sin reducir su patrimonio neto (el patrimonio neto, o riqueza neta, de un hogar es la diferencia entre sus activos y sus pasivos; el patrimonio neto, o riqueza neta real es el resultado de deflactar este saldo contable por el índice de precios del consumo final). Dada esta dualidad es importante aclarar las diferencias que existen entre las dos definiciones:
Las ganancias y pérdidas de capital, denominadas en las cuentas nacionales “ganancias y pérdidas en tenencia”, están relacionadas con la evolución de los cambios de precios, bien sea de activos fijos (principalmente vivienda) o de activos financieros (principalmente acciones). En los países de la OCDE los hogares se han beneficiado en varias ocasiones, durante el pasado reciente, de los incrementos, o han sufrido con las caídas, de los precios de estos dos tipos de activos. En particular, merece la pena recordar la burbuja bursátil a finales de los 90 y la caída en picada de las cotizaciones bursátiles que se inició en el año 2000. Cuando las evoluciones de los precios de los activos fijos, o de las cotizaciones de las acciones, son positivas las ganancias en tenencia permiten a los hogares consumir por encima de su ingreso disponible, sin reducir su patrimonio neto. Por el contrario, ganancias en tenencia negativas (es decir, pérdidas) obligan a los hogares a consumir menos que su ingreso disponible, para compensar la caída de su patrimonio neto. Estos montos de ganancias y/o pérdidas pueden incluirse en la definición de ingreso que utilizan los economistas, pero no están incluidos en la definición de ingreso que utilizan las cuentas nacionales.
Una segunda diferencia es que el ingreso teórico (definición de los economistas) comprende transferencias de capital, mientras que en las cuentas nacionales el cálculo del ingreso disponible incluye solamente transferencias corrientes.
Por último, el patrimonio neto de un hogar puede verse afectado por acontecimientos completamente independientes de la actividad económica, que es la que constituye el objeto principal de las cuentas nacionales. Así, las inundaciones, los incendios forestales, las tempestades y los terremotos reducen el patrimonio neto, dada la destrucción de edificios y de otros tipos de propiedad que ocasionan estos fenómenos de la naturaleza. Por el contrario, el patrimonio neto incrementa su valor cuando, por ejemplo, se descubre un yacimiento de petróleo en una explotación agrícola. En cuentas nacionales, las variaciones del valor de los activos, como consecuencia de acontecimientos de esta naturaleza, se registran en la cuenta “otras variaciones del volumen de activos”, pero no se consideran ingreso.
Sin embargo, mediante la combinación de diferentes cuentas, el sistema de cuentas nacionales permite calcular, el patrimonio neto de los hogares basado en el concepto teórico de ingreso, de tal manera que sería posible utilizar el concepto de ingreso teórico en lugar del de ingreso disponible.
Ejercicios para el Capítulo 6
Ejercicio 1: ¿Verdadero o falso?
Cuando el precio de las acciones se eleva:
El ingreso disponible de los hogares crece.
El ahorro de los hogares decrece.
Cuando un arrendatario adquiere el apartamento que tenía alquilado, el PIB crece porque ahora incluye, además, el alquiler imputado del nuevo propietario que habita su propia vivienda.
Cuando, en un año determinado, el número de accidentes de carretera es mayor de lo normal, el ingreso disponible de los hogares también tiende a ser más elevada de lo normal.
Un incremento de la tasa impositiva sobre el ingreso se traduce en una caída del ingreso disponible de los hogares.
El propietario de un olivar cuya cosecha de aceitunas ha sido destruida por una tormenta sufre, automáticamente, una caída de su ingreso disponible.
Una reducción de los derechos de sucesión se traduce mecánicamente en una reducción del ahorro de los hogares.
La reducción de los reembolsos por cuidados dentales implica:
Un alza del PIB.
Una baja del ingreso disponible de los hogares.
Ejercicio 2: Compruebe su conocimiento de las cuentas de los hogares
Refleje las operaciones que se describen más abajo en la secuencia de cuentas desde la cuenta de producción hasta la cuenta de utilización del ingreso disponible.
La familia Devant se compone de Jacques, su esposa Monique, su hija Nicole, Simone, que es la madre de Monique, y Xavier, hermano de Jacques. Durante el año:
Jacques recibe un salario de 2 000 por su trabajo como gerente de un comercio. Su empleador paga 20 por concepto de contribuciones sociales. Jacques paga 25 de impuesto sobre el ingreso, 15 de contribuciones sociales, gasta 100 en transporte y alimentación y 280 en comprar un coche nuevo. Él financia esta compra con un préstamo y paga 5 de intereses en el conjunto del año. Él confía el resto de su salario a Monique, que es quien lleva las cuentas de la casa.
Monique ha estado desempleada todo el año y ha recibido 350 por concepto de subsidio de desempleo. Ella gasta 1 900 en alimentos, 120 en alquileres y 15 en seguros del hogar (aunque ella no es consciente, 5 de estos 15 corresponden a la remuneración del servicio que le presta la compañía de seguros).
Simone recibe 45 de un fondo de pensiones al que estaba afiliado su fallecido esposo, así como una pensión de 265 del sistema de seguridad social. Ella gasta 130 en ropa y entrega a Nicole 25 en dinero de bolsillo.
Nicole gasta todo el dinero que le da su abuela en bombones. Ella recibe también 30 en dinero de bolsillo de sus padres, pero lo ahorra para poder comprar una bicicleta.
Xavier no tiene empleo fijo, pero realiza trabajos “en negro” (es decir, sin declarar fiscalmente) para los vecinos y conocidos (pintura de paredes, verjas, etc.). Esto le produce unos ingresos de 1 500 al año, de los que gasta 400 en pintura, pinceles y otro material de trabajo. Ocasionalmente se ayuda de un amigo al que paga 40. Cuando está en cualquiera de los sitios donde trabaja deja su automóvil en un estacionamiento no autorizado, por lo que su vehículo fue inmovilizado una vez por la policía y, para liberarlo, tuvo que pagar una multa de 20. Ha gastado 450 en tabaco, cervezas y entradas de fútbol. Paga 60 por concepto de pensión alimenticia a su ex‐esposa.
Cuenta de producción
Usos |
Recursos |
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Consumo intermedio |
Producción bruta |
Valor agregado |
Cuenta de distribución primaria del ingreso
Usos |
Recursos |
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Remuneración de los empleados |
Valor agregado |
Sueldos y salarios |
|
Contribuciones sociales de los empleadores |
|
Impuestos netos sobre los productos |
|
Ingreso mixto/excedente de explotación |
Cuenta de asignación del ingreso primario
Usos |
Recursos |
---|---|
Renta de la propiedad |
Ingreso mixto/excedente de explotación |
Intereses |
Remuneración de los empleados |
Alquileres |
Sueldos y salarios |
Contribuciones sociales de los empleadores |
|
Renta de la propiedad |
|
Intereses |
|
Alquileres |
|
Saldo del ingreso primario |
Cuenta de distribución secundaria del ingreso
Usos |
Recursos |
---|---|
Impuestos corrientes sobre el ingreso, la riqueza, etc. |
Saldo del ingreso primario |
Contribuciones sociales |
Prestaciones sociales otras que transferencias sociales en especie |
Contribuciones sociales de los empleadores |
Prestaciones de seguro social en dinero |
Contribuciones sociales de los empleados |
Prestaciones de asistencia social en dinero |
Contribuciones sociales de los independientes |
|
Otras transferencias corrientes |
Otras transferencias corrientes |
Primas netas de seguros generales |
Indemnizaciones de seguros generales |
Otras transferencias corrientes |
Otras transferencias corrientes |
Ingreso disponible |
Cuenta de utilización del ingreso disponible
Usos |
Recursos |
---|---|
Gasto de consumo final de los hogares |
Ingreso disponible |
Ajuste por cambio en los derechos de pensión |
|
Ahorro |
Las soluciones a estos ejercicios están disponibles en el sitio web de la OCDE.
Nota
← 1. Esto también es cierto para Alemania. Véase en el Capítulo 3 las consecuencias sobre la comparabilidad de las tasas de ganancia.