La presupuestación verde se refiere al uso de herramientas de creación de políticas presupuestarias para lograr objetivos climáticos y medioambientales. Implica evaluar el impacto climático y medioambiental de las políticas presupuestarias y fiscales y alinearlas con compromisos nacionales e internacionales. La presupuestación verde consta de cuatro pilares aplicables a todo el ciclo presupuestario: i) marcos institucionales; ii) métodos y herramientas; iii) rendición de cuentas y transparencia; y iv) entorno favorable a la presupuestación (OCDE, 2020). En 2022, 5 de los 12 países encuestados de América Latina y el Caribe (ALC) (Chile, Colombia, Honduras, México y República Dominicana) informaron aplicar presupuestación verde (42%). Argentina planifica introducirla y otros cinco países lo están considerando (Gráfico 6.1). En cambio, 24 de los 36 países encuestados de la OCDE (67%) la implementan, cifra que casi se ha duplicado entre 2021 y 2022 (OCDE, 2023).
El Índice 2022 de Presupuestación Verde de la OCDE mide el grado en que los países han adoptado la presupuestación verde. Se basa en los cuatro pilares del Marco de Presupuestación Verde, que ayuda a los formuladores de políticas a diseñar y crear estos presupuestos. De los cinco países de ALC con presupuestación verde, México tiene la puntuación global más alta (0.43). Al igual que en los países de la OCDE, las puntuaciones promedio más altas entre los países de ALC corresponden al entorno favorable para la elaboración de presupuestos (0.14) y a arreglos institucionales (0.12). La mayor diferencia entre los países de la OCDE y los de ALC reside en los métodos y herramientas (0.12 y 0.07, respectivamente). La excepción es México, que hace un uso amplio de las herramientas de presupuestación verde y tiene una puntuación de 0.14 (Gráfico 6.2).
Algunas herramientas de presupuestación verde que se utilizan ampliamente en los países de la OCDE no son tan comunes en ALC. Tres de los cinco países (60%) utilizan instrumentos de fijación de precios del carbono y etiquetado de presupuesto verde, mientras que 92% de los países de la OCDE con presupuestación verde utiliza instrumentos de fijación de precios del carbono. México es el único país de ALC que utiliza análisis de impacto ambiental (Gráfico 6.3). La brecha entre los países de la OCDE y los de ALC también se muestra en el uso de herramientas emergentes. El 25% de los países de la OCDE (6 de 24) incorpora perspectivas verdes en las revisiones del gasto (OCDE, 2023), y ningún país en ALC (Gráfico 6.3).
El alcance de la presupuestación verde abarca el gasto de inversión en cuatro países y el gasto operativo en tres. Solo Colombia incluye el gasto discrecional y el obligatorio. Ninguno de los países incluye el gasto fiscal (Gráfico en línea F.3.1). Todos los países de ALC establecen los requisitos para la elaboración de presupuestación verde en circulares, notas de orientación o documentos similares, mientras que Chile y México también los han incorporado en leyes presupuestarias y otras legislaciones relevantes. Los ministerios de finanzas son responsables de la implementación de los marcos de presupuestación verde en cuatro de los países de ALC. En Colombia y México, el Ministerio de Medio Ambiente es responsable de la implementación junto con el Ministerio de Finanzas (Gráfico en línea F.3.2).