Los retos políticos repentinos y de gran complejidad exigen una fuerza laboral competente. El sector público compite cada vez más por los profesionales, lo que requiere un enfoque estratégico para atraer talento. Para captar de forma proactiva el talento adecuado, los gobiernos deben identificar primero el perfil de los empleados que necesitan como parte del proceso de contratación, y luego, utilizar estrategias específicas adaptadas a la contratación de las competencias necesarias. De igual modo, debe fomentar entornos laborales atractivos y oportunidades de carrera claramente definidas para atraer a un mayor número de candidatos y mejorar su calidad y diversidad.
Al reclutar personal, los gobiernos deben identificar las competencias necesarias para hacer frente a los retos de la administración pública actual. La OCDE utiliza un índice compuesto para evaluar el uso de prácticas y herramientas proactivas para el reclutamiento de candidatos cualificados (OCDE, 2021). Estas herramientas ayudan a los empleadores públicos a conocer el mercado laboral y los factores que impulsan a los candidatos a solicitar puestos en el sector público, a la vez que permiten que los gobiernos lleguen a los grupos que desean contratar mediante estrategias a medida. El índice también tiene en cuenta la capacidad de los gobiernos para ajustarse a los salarios vigentes en el mercado. En promedio, en América Latina y el Caribe (ALC) las prácticas proactivas de contratación (con una puntuación de 0.27 en el índice) se utilizan menos que en los países de la OCDE (0.44). Colombia, Ecuador y México están a la cabeza (Gráfico 13.1).
A menudo, los gobiernos tienen que recurrir a procesos de contratación a medida para conseguir los candidatos adecuados. Entre los países de ALC, el enfoque más común para llegar a los candidatos que requieren son las campañas de comunicación en periódicos o redes sociales (7 de 15 países; 47%). En cambio, solo Chile, Colombia y Ecuador utilizan servicios de búsqueda de talentos para cubrir puestos. Asimismo, solo tres países, Barbados, Paraguay y Trinidad y Tobago cuentan con un proceso de contratación acelerado para reclutar funcionarios cuyas aptitudes son altamente demandadas. En Brasil, por ejemplo, el sector público siempre se ha percibido como un empleador atractivo, por lo tanto, las entidades no emplean ninguna herramienta para ampliar el grupo de candidatos potenciales (Gráfico 13.2). Los países de ALC podría beneficiarse de prácticas de contratación a medida para atraer funcionarios de los distintos niveles de gobierno, en particular aquellos con competencias mejor valoradas en el sector privado, como en el ámbito digital.
Otra forma de atraer a los candidatos adecuados es posicionando al sector público como un sitio atractivo para trabajar. En ALC se destacan diferentes beneficios de los empleos en la administración pública, resaltando su estabilidad, remuneración competitiva y oportunidades de crecimiento profesional. La estabilidad laboral es el beneficio más frecuentemente destacado en ALC, con 10 de 15 países (67%) que la resaltan como una ventaja. Las prestaciones de seguridad social, como seguro médico y planes de pensiones, son destacadas por 8 de los 15 países (53%). Otros factores cruciales, como la promoción profesional, la conciliación de la vida laboral y familiar y el acceso a programas de aprendizaje y desarrollo se destacan en 4 de los 15 países (27%). Solo tres países destacan un entorno de trabajo positivo como argumento de venta clave (Gráfico 13.3).